Desde la divulgación no dejamos de repetir la importancia de la buena evidencia científica, pero ¿por qué? ¿En qué nos basamos? Existen motivos más que buenos para pedir algo así, pero para entenderlos tenemos que dirigir la vista atrás, hacia nuestro pasado. En la historia se oculta una realidad a la que no queremos volver bajo ningún concepto, donde la muerte estaba a la orden del día y los médicos se habían ganado el nombre de “matasanos”.